La noche del 4 al 5 de septiembre de 1998, Isidre y Dolors Orrit desaparecieron del Hospital San Juan de Dios de Manresa en circunstancias inexplicables y sin dejar rastro. Isidre tenía 5 años y su hermana Dolors 17. Treinta y tres años después de la desaparición, el caso sigue sin resolverse y las responsabilidades nunca han sido depuradas.
El documental de Ferran Ureña y Marc Solanes intenta reconstruir los hechos dando voz a la familia y al papel que tuvieron periodistas como Paco Lobatón que, con el programa «Quién sabe dónde», jugó un papel clave en la investigación que se lleva a cabo. De forma impecable, el documental va desvelando la forma en que la sociedad y los medios de comunicación del momento no siempre estuvieron a la altura de unos hechos de dimensión tan trágica.
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